NUEVA FORMA DE INTIMIDAR AL PRÓJIMO: LOS ESTUDIOS

by - viernes, julio 05, 2019


Autora: Belinda Ondo

¡Saludos queridos LivAglayers! Me hace mucha ilusión poder compartir por primera vez mis inquietudes con vosotros, en parte porque estoy segura de que muchos de nosotros hemos pensado en lo mismo una y otra vez. Muchos nos hemos hecho estas preguntas: ¿Por qué imponer nuestro título académico a otros? ¿Qué ganamos al tratar de intimidar a los demás por el simple hecho de tener más estudios? Y no solo profesionalmente sino también personalmente, ¿tiene nuestra pareja que respetarnos por el hecho de ser doctores, tener un master o ser licenciados? ¿O simplemente por el hecho de ser nuestro/a compañero/a sentimental? ¿O por las dos cosas?

Este es un tema cuyo interés crece día a día, debido a que nuestra sociedad también crece al mismo paso profesionalmente y mentalmente. Por esa razón y más, me he visto en la posición de dar mi humilde opinión respecto a esta cuestión, con la esperanza de llegar, con mis palabras, a más gente que haya tenido estas mismas preguntas en su mente, y poder escuchar o leer simplemente lo que tengan que decir al respecto.
Habiendo deducido ya los puntos que determinarán este artículo, veo conveniente empezar diciendo que la educación es una de las mejores formas que ha encontrado el ser humano de crecer y realizarse, de adquirir una posición en la sociedad y de ser reconocido entre otros. Tener la oportunidad de conseguir un título universitario nos abre las puertas a muchos lugares, nos permite no solo madurar nosotros mismos sino participar en proyectos que ayuden a otros a madurar, razón no necesariamente suficiente como para denigrar a aquellos que no hayan tenido esa oportunidad, o que simplemente no la hayan considerado importante para el desenvolvimiento de sus vidas.

¿Porqué imponer nuestro título académico a otros? No es suficiente el hecho de que tengas un cuadro de tu licenciatura, máster o doctorado en tu hogar o en tu oficina?, ¿ves necesario tener que gritarlo a cien vientos para que así la gente se dé cuenta de tus logros? Yo personalmente creo que esa es una forma muy retrógrada de dar a conocer los logros de una persona cualificada. Creo en el hecho de que si de verdad pusiste todo tu esfuerzo en conseguir tus títulos, no hace falta promocionarlos para que se den a conocer incluso en esferas no relevantes, “los hechos hablan por sí solos”, usualmente decimos en la sociedad, entonces no veo razón esencial en proclamarte a ti mismo mejor que otros solo por tener más “papeles” que te acrediten como tal. 

En esta vida he aprendido que no basta con tener un certificado que te declare capacitado para algún puesto, sino que hay que demostrar esa capacidad prácticamente. He visto a gente con títulos bloquearse en frente de una computadora como si nunca hubiesen visto una en sus vidas, y a otros sin títulos o en proceso de conseguirlos, manejar una computadora como si durmieran y despertaran con ella todos los días de su vida. Este hecho me hizo entender que no basta con solo palabras sino acciones, no bastan solo los papeles sino también las prácticas, y que no basta con imponer a alguien tu título si a la hora de la verdad no puedes defenderte en ese campo.

¿Qué ganamos al tratar de intimidar a los demás por el simple hecho de tener más estudios?
Los estudios se han convertido en otra de las razones por las cuales la gente se ve intimidada en nuestra sociedad, ¿no es cierto? Yo tengo una licenciatura en Marketing, ¿tú qué tienes?, yo he estudiado en la mejor universidad de Francia y tú estudiaste en Togo, ¿crees que puedes compararte conmigo?
La mayor parte de mi vida he escuchado comentarios como esos y, ¿sabéis qué? Me he reído incansablemente porque tengo clarísimo que da igual el lugar donde estudies si de verdad estudias, da igual el idioma en que estudies si consigues dominarlo y hacer que la gente te entienda, y que no importa nada que consigas un doctorado en Harvard si en realidad no puedes terminar
una oración en un inglés correcto (nótese el sentido figurado).

Es normal que en muchos círculos de amistad destaquen algunos por su nivel de educación, por el estatus que ocupan, o simplemente por tener más carisma. Eso no significa que los demás deban sentirse acomplejados o minimizados, todo lo contrario, eso debería suponer un empuje de motivación para ellos, una competencia sana entre personas que se apoyen y motiven a ser mejores, a hacer más sin tener que pisarse unos a otros.
¿Tienes un master y quieres hacerte amigo de alguien sin estudios? Vamos, ¡adelante! No hay nada de malo en eso, incluso  un analfabeto puede aconsejarte en otros aspectos de la vida en los que tenga más experiencia que tú ¿No suena fácil? Entonces, ¿por qué agruparse y rechazar a otros por el simple hecho de no pertenecer a la misma “clase social” o tener el mismo nivel académico que nosotros?

La parte más complicada es la de entablar una relación romántica con alguien que desafortunadamente tenga esos erróneos principios como su guía de vida. Yo sinceramente afirmo que no es sano “hacerse de menos” si compartes tu vida con otra persona. Aparte de minarse mutuamente la moral, estarían en constante desacuerdo, la razón siendo que cada uno creería que su opinión es la correcta y denigrando al otro. Por lo tanto, esposo o esposa, novio o novia, sean licenciados o doctorados, dejen sus títulos en sus respectivos puestos de trabajo y traten de llegar a conclusiones juntos sin tener que imponer su título al otro para hacerle ver que su idea es la adecuada.

Desde el momento en el que decides acercarte a una persona y hablarle de tus sentimientos con la esperanza de que te corresponda, olvídate de tu título y céntrate en hacer que esa persona te quiera y te acepte por quien eres y como eres, no por el “papel” que certifica que tienes algo que muchos no tienen. Bien, pasaste por mucho para conseguirlo y crees que sería un desperdicio no aclamarlo y disfrutar de los aplausos de la gente, pero déjame decirte algo que siempre me decía mi padre: “Cuando eres alguien importante, no hace falta mencionar tu nombre para que la gente lo conozca”. Por eso, cuando de verdad estás capacitado para realizar tareas y proyectos que maravillarían a mucha gente, no te alarmes, no grites, trabaja, enfócate en tus metas y te darás cuenta de que no necesitas pronunciarte para tener la atención de la gente si es lo que de verdad ansías.

Recuerdo que en 1˚ de Bachillerato tuve a un profesor que justo acababa de llegar de Rusia con un master en Economía. Era muy extraño para mí y para mis colegas, tanto que muchos de ellos le preguntaban porqué había decidido dar clases en un centro privado, mientras que con su título podría estar en otra empresa o en un ministerio con un salario muchísimo mejor que el de profesor. Me acuerdo que él sonreía y nos decía: “chicos, esto es un ejemplo que debéis guardar por el resto de vuestras vidas, yo he estudiado, me lo he currado y sé lo que valgo. Guinea es mi país, por lo tanto, no me hace falta ir dejando mi curriculum a nadie para conseguir un trabajo (se refería al "enchufismo" y no al "networking"), mi nombre saldrá a relucir en alguna reunión y me llamarán para contratar mis servicios”. Por supuesto, nos reímos porque no podíamos entender su seguridad, la seguridad que le proporcionaba estar capacitado para hacer cosas que en esos tiempos eran difíciles de hacer ¡Qué ilusos fuimos en aquel momento! 
Un año después, ya en 2˚ de Bachillerato, vimos llegar al mismo profesor en un cochazo y vestido de traje, nos quedamos asombrados. Luego nos enteramos de que estaba trabajando para una empresa privada y que ganaba mucho dinero. Lo que quiero que nos preguntemos ahora con este caso es: ¿le hizo falta a mi profesor proclamar a todo dios que tenía un máster para conseguir sus metas? ¿Tuvo que pasar por encima de alguien para conseguir el puesto que se le ofreció? No, ¿verdad? Pues, no veo el porqué alarmar tanto para conseguir la atención de la gente, tratar de ponernos por encima de los demás para poder ser notados y/o minimizar a otros para poder resaltar nuestros logros.
Deberíamos felicitarnos unos a otros más a menudo, motivarnos, empoderar a más gente a conseguir lo que nosotros hayamos conseguido, enfocarnos en el potencial de los demás sin que tenga que predominar el “¿qué has estudiado?, el “¿dónde has estudiado?” Todos podríamos conseguir algo en la vida, con o sin estudios, el caso está en poner empeño y dedicación.

Gracias de antemano a todos los que quieran comentar y compartir sus opiniones ¡Nos leemos pronto!


TU OPINIÓN NOS IMPORTA, no olvides compartirla, COMENTA QUE TE LEEMOS. SÍGUENOS  EN NUESTRAS REDES SOCIALES, REGALA UN LIKE, COMPARTE CON OTROS Y SUSCRÍBETE. CAMBIA VIDAS.

Otros que pueden gustarte

7 comentarios

  1. Muchas gracias por este pedazo de texto que has compartido con nosotros. La calidad del fragmento sólo es comparable a la profundidad con la que haces llegar el mensaje. Yo personalmente creo que debemos dejar de pensar que una persona tiene más valor como persona simplemente por tener un título. Debemos aprender a conocer a las personas que nos rodean por interés genuino no porque posea una clase social o diploma en concreto. Y estoy de acuerdo con lo 1ue te dijo tu padre ("cuando eres alguien importante, no hace falta decir tu nombre para que la gente te conozca" ). Gracias Belinda Ondó!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias a ti Christian por tomarte un momento y dejar este comentario tan motivador. Entre todos podemos hacer los cambios que necesitamos. Gracias de nuevo!

      Eliminar
  2. Más claro imposible, un tema en todas las reglas Belinda, es un problema que estamos arrastrando últimamente en nuestra sociedad y espero que con ese magnífico texto podamos hacer conciencia y mejorar

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tus palabras. Es bueno que nos estemos dando cuenta y nos atrevamos a hablar de estas cosas, seguro que irá llegando el mensaje.

      Eliminar
  3. Es impresionante y de muy importante porque muchos actualmente confunden las cosas cosificando a las personas

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por tu comentario! Sí que parece paradójico pero es algo que está pasando.

      Eliminar
  4. Hola Viviana!!! Qué bueno que dejaras tan hermoso mensaje para Belinda, recibe un fuerte abrazo de su parte y profunda gratitud. Gracias por visitar LivAglaya y comentar! Tienes también nuestro correo en "contacto" para más detalles y otras cuestiones.

    ResponderEliminar

TU OPINIÓN NOS IMPORTA, ¡COMPÁRTELA!